En un contexto donde la tecnología agrícola avanza a gran velocidad, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) ha dado un paso decisivo al habilitar el uso de drones en la aplicación de fitosanitarios. Esta medida permite que las empresas incluyan en las etiquetas de sus productos recomendaciones específicas para su uso con drones, lo que representa un avance significativo para la agricultura de precisión en Argentina.

El anuncio, emitido el pasado viernes 27 de septiembre, se alinea con el creciente interés por tecnologías que optimicen el uso de insumos, reduzcan el impacto ambiental y garanticen la seguridad de los aplicadores. CASAFE (Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes), a través de su coordinador de Gestión Sustentable, Federico Elorza, ha sido un firme defensor de esta innovación. Según Elorza, «la incorporación de drones en la aplicación de fitosanitarios representa un cambio de paradigma para la agricultura sustentable.

Un paso hacia una agricultura más eficiente y responsable

El uso de drones para la aplicación de fitosanitarios ofrece múltiples beneficios para los productores agrícolas, al mejorar la precisión y reducir el uso innecesario de productos químicos. Esta tecnología permite aplicar los fitosanitarios con una exactitud milimétrica, evitando áreas no afectadas y minimizando el desperdicio de insumos. Además, los drones tienen la capacidad de acceder a áreas difíciles de alcanzar, como la copa de los árboles, lo que aumenta su eficacia en terrenos complejos.

Uno de los aspectos clave que resalta CASAFE es la reducción de la exposición de los aplicadores a los productos fitosanitarios, ya que los drones operan de forma remota, disminuyendo el contacto directo con los químicos. Esto no solo mejora la seguridad de los trabajadores, sino que también se alinea con las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), promovidas tanto por CASAFE como por las normativas internacionales.

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