Habilitar una política regulatoria a nivel mundial promoverá la realización del potencial de la biotecnología animal.
Las biotecnologías animales tienen el potencial de mejorar la sostenibilidad y la seguridad de nuestros sistemas alimentarios globales. Las autoridades reguladoras gubernamentales son responsables de garantizar la seguridad de los alimentos que consumen sus ciudadanos, ya sea que se produzcan mediante métodos de reproducción convencionales o biotecnologías. Si bien algunos países han implementado políticas de supervisión de la biotecnología animal, muchos países aún tienen que desarrollar las suyas.